martes, 21 de diciembre de 2010

Sus labios escogen, y sólo quiere hablar.


Hoy vuelve a estar desnuda,
pero triste.

Afilada en todos sus vértices redondos
como una lanza roma que caza mamuts,
pide por sed y le ofrecen más veneno.

Mientras se rompe la superficie
se alimenta de nucleones el miedo
y acentúa sus recovecos
la parte oscura de una sombra:
______consumida
______insípida
______Metódica.
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Ahora sus venas son un poco más azules
como en los libros de biología
(o en los cuentos de hadas)
Y, aunque pinte carmín
las comisuras violetas de Diciembre…
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Nada enciende sus mejillas.
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Su cara vuelve a estar desnuda.
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… Pero ella no quiere estar triste.
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( 8 )
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La vida no es un deporte de espectáculo, ganar, perder o empatar. El juego va en progreso, tanto si nos gusta como si no.
Así que hazlo, discute con los demás, haz trampas, cambia las normas, tómate un respiro y atiende a tus heridas. Pero juega... juega, JUEGA.
Juega duro, juega rápido, juega dulce y libremente, juega como si no existiera un mañana.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Finjamos que nada nos puede hacer daño



Un poco de calor eléctrico
para este invierno que no ha empezado.
Por qué tengo siempre las manos tan frías
con todo lo que te quiero.

es conocerte
aprenderme tu olor
Es una bendición del cielo nuevo
sobre las ruinas de otra ciudad.

Verde la sangre pero feliz.
Saber que no sé nada
y no me importa
(creo)
¿Creo?
Soy creyente y mientes como nadie,
pero hoy no te has puesto la gabardina
y va a llover.

Sois la cuerda trenzada
la sutileza de las peticiones,
cuero negro y roto
como metáfora de metáfora.


Como todo.



( 8 )

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No te acostumbres, así siempre te pilla desprevenido y siempre sientes el cosquilleo que te alegra el día, o el sopetón del 'no me lo esperaba', como una calada de vida o un pensamiento similar a 'pero qué bonita eres, coño', sabes entonces que es mutuo y se te pone la sonrisa de idiota por dentro, seguro, suena como los abrazos a distancia o besos con lluvia, según cómo se tercie. Te sientes pequeño y estás a gusto.

Y para qué engañarnos... esa sensación está de p*ta madre

domingo, 7 de noviembre de 2010

viernes, 5 de noviembre de 2010

¿A qué huele la sangre?


¿Sabe a metal la boca del estómago?
Pero todo huele a esponjas húmedas
si muerdes sangre.
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Y estos ojos azules de juventud preñada.
El hierro en las uñas afiladas
con leones y restaurantes abiertos tres siglos.
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(Yo también la echo de menos.
Cómo recitaba las eses
y presumía de marfiles alineados
como constelaciones
en nacionalismos que se hacen trenzas
negras
como los lunares prohibidos.
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Dónde estás.)
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¿Y ahora?
Ésta pone los ojos así
cuando habla de soledad, muerte y locura.
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Insultante otoño
del rojo granada y marrón esparto.
Pero todavía estamos verdes
y nos ahoga el plomo de batallas naturales
perdidas
que nacerán mañana.
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( 8 )
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Por lo demás no ha cambiado nada, pero nada sigue igual.

domingo, 3 de octubre de 2010

¿En qué se parecen un cuervo y un escritorio?

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No siento nada, ahora:
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ni la yema de los dedos,
los calambres
las miradas
y los gestos;
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Eso que cambia el gusto
y eleva el gasto
de saliva.
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Yo también tengo una mano amiga
y árboles llenos de ramas en mi espalda.
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Me confundo contándome cuentos,
no valen valores en las baldas
y en balde quiebra la línea y luego yo,
ego,
istmo donde no hay más tierra,
materia negra
y fría
sin cruces pero con cortes.
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Espero que no te importe
porque a mí
la antimateria
_______me hace indiferente
_______destrozo trazos como trenzas
_______y hiero si quiero o no.
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Escribo sin con-junciones,
no me llego a los talones,
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Los soplos sólo sienten la vida
si ya está muerta.
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( 8 )
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Antes eras mucho más muchástico, has perdido muchedad


Dulce locura, tú mi droga más dura.



Con cuerdas anudadas en los dedos
como si fueran telarañas,
me ato los cordones
y me pongo la zancadilla.
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Muerdo el aire que te falta en el cuello
y me veo más bailando en fuego
de lo que nunca antes había jugado.
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Décimas y centésimas deliran
del mal humor al sol de hoy
y a todo eso que guardo en servilletas usadas.
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Me abrazas los abrazos,
desafías las miradas
y los teléfonos
y el ruido.
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Siempre el ruido.
Ruido huido y huyendo por tradición.
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Yo sí que no tengo tango, corazón,
ni razón sin-con.pasión
y no rimo participios.
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Olvido los principios
y me voy por las ramas bajo tierra,
subterfugios sucios
socios de mis andanzas.
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Soy como un camión de mudanzas
que sólo tiene segundo piso,
y no lleva más que cajas
de cartón vacías
una vida a cachos
pedacitos de ti
tarros de miel
...
Incoherencias.
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Como cuando discutimos
o se me enredan las cuerdas de las manos
.
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( 8 )
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-Yo no me sé expresar -dijo la Maga-. A lo mejor otras podrían explicarlo mejor pero yo siempre he sido igual, es mucho más fácil hablar de las cosas tristes que de las alegres.



jueves, 26 de agosto de 2010

Y cuando vuelves hay fiesta en la cocina




Te vas
cuando sale el rocío de los lagos secos,
no preguntas.
Ni siquiera te despides.

Me dejas defendiéndote
con uñas
(Y ojos brillantes que aprendí de ti)
diciéndole a todos
que tú también eres vida
_y que me han crecido tus andares
_desafiando la propiedad de los tejados.

Me escoges
entre todos los que tienes
y velas dormida la noche,
entrelazando las lunas,
rompiendo jarrones,
arrinconándome en la cama
siempre que me quedo quieta
para que no te alejes,
para que me dejes tumbarme a tus pies.
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Y así robarle al rocío
las pocas mañanas que no madrugas.
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( 8 )
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... y los gatos, siempre inevitablemente los minouche morrongos miaumiau kitten kat chat cat gatto grises y blancos y negros y de albañal, dueños del tiempo y de las baldosas tibias, invariables amigos de la Maga que sabía hacerles cosquillas en la barriga y les hablaba un lenguaje entre tonto y misterioso, con citas a plazo fijo, consejos y advertencias.

lunes, 26 de julio de 2010

Maga

Entonces…
cuando la retama devore los tobillos,
luego las rodillas,
los vientres,
las caderas inertes
de distancia
(y aferre en años,
lustros
pasado mañana)
todo tan lleno de hierba,
tan tibio,
como una infancia tardía
o prematura vejez;
entonces,
¿huirán los erizos?

Caeremos en esmeraldas que son soles
que danzan solos y descalzos.
Tan poco fango
y tantas ciudades.

Buscaremos más arena en los portales
de palabras en negrita.

Talarán muñones autobuses
y una corona de plástico del chino.
O una azotea con luz verde
y amaneceres
y constelaciones.
Con canciones que paren mariposas
como flores horarias.

Dará un vuelco, (la vida)
donde las interrogaciones se meterán en los armarios
y vestiremos calor y sed
y cosas bonitas;
dónde irá la duda
ya con camisa de fuerza:

Nos envidiarán los cíclopes
Hablarán las farolas con las papeleras
Seremos perennes como espinas
Se suicidará el calendario en otro bolsillo.

Sólo será un sueño dulce
durmiendo en un colchón de pinchos.


( 8 )

(La modificaré)

lunes, 19 de julio de 2010

Y en el marcador...


Que no quiero escribir más epitafios
ni agarrones de dolor en el pecho
que no se van ni con cerveza negra,
que salen por los ojos.


Deja en paz a mi madre,
Karma, Dios o quien c*ño seas.
Haz que sonría
que beba
que viaje
que disfrute.
______Déjala en paz.


Ha roto el alma con su
“me estoy quedando sin amigos”
y la sobredosis de realidad
que eso lleva detrás
y delante
de tanatorios repetidos
en menos de un año.


Escondemos la nariz en otros hombros
y la afinidad y empatía nos hunden
y ríes porque mamá ríe.
Y a la inversa el verso
y el verbo
y todos esos atijos de
verano, vermú y cartas,
tantas tartas
y tanto tiempo (des)esperando hoy.


Porque lo sabes,
y ella también lo sabe.
Y espera.

Ha sido una coda
de toda una sinfonía;
almohadas acolchando el final,
rezando que nunca llegue.



Y se acaba.
Y aún no estaban preparados.

( 8 )















Y era tan natural cruzar la calle, subir los peldaños del puente, entrar en su delgada cintura y acercarme a la Maga que sonreía sin sorpresa, convencida como yo de que un encuentro casual era lo menos casual en nuestras vidas, y que la gente que se da citas precisas es la misma que necesita papel rayado para escribirse o que aprieta desde abajo el tubo de dentífrico.

(Rayuela)

jueves, 1 de julio de 2010

No hay manera.


Qué dolor de pies me entra
cuando intento destrozar vidas
masticar incoherencias
escoger palabras
y un tornillo sinfín de cabezas que agachar.

Ya no sé si oigo mosquitos
o son los gritos que evitó el easy-going
de la caja tonta y los fines de semana.

Puedes llamarme enana
y agarrarme del pescuezo
y torturarme con tus métodos
y todos esos remolinos
que son kilómetros.

O, si no,
digievolucionarán los progres como las madres
y harán guerras de agujeros que no son trincheras,
más bien caprichos.

Llamaremos a todo esto “El diccionario de la Y Griega”
(o cómo hacer castillos con la arena del gato)
y tragar harina,
como cuando se muerde el polvo
o se esnifa coca.


Así, despacito. Sin sentir que duele.
( 8 )
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Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño.

domingo, 23 de mayo de 2010

GENERACIÓN RE(E)VOLUCIÓN



Como dice mi madre:
“No hemos inventado nada:
No tenemos buena música
ni guerrillas urbanas
ni dictaduras
con reuniones secretas.

No hemos pasado hambre
ni huido de la policía.
No llegamos primeros a la luna.
No nos pusimos el primer bikini
Ni conocimos al negrito
que anunciaba el Cola-Cao.”
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Somos la generación de las ortodoncias
y las cremas anti-acné.
Los miopes. Los torpes.
Los que sólo toman café.
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Con alergias al polen,
al polvo, a los gatos.
Con muchos medios
y muy malos tratos.
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Inventamos el bulling,
youtube,
las redes sociales.
Tnmos 1 lxa etrna cn ls vocals.
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Odiamos nuestros tímpanos
y nos compramos altavoces.
Comemos petróleo con colorantes.
Miramos el móvil a cada instante.
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Las niñas son mujeres a los doce.
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Sembramos tribus urbanas
y recogemos gente que no piensa lo que dice,
que malviven con miedo al rechazo
y a que le den una paliza en la próxima esquina.
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Nos hacen ignorantes
y si nos doman, nos dejamos.
Mientras no quiten el fútbol
y podamos ver el cotilleo…
¡Que hagan de nosotros
animalitos de paseo!
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Hablamos por privados,
crecimos con los Simpson,
llevamos el 3D al cine,
abrimos un blog.
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No tenemos intimidad.
1984 pero sin cinturones rojos.
Algún día seremos cojos.
¿para qué queremos cinco dedos en los pies?
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Pero, ya ves,
no hemos descubierto la cura para el cáncer,
ni acabamos con el sida.
La gente se sigue muriendo de hambre,
las guerras quitan muchas vidas.
La tierra, por su parte,
nos escupe fuego en los ojos.
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Vivimos entre epidemias políticas
y catástrofes naturales.
Terremotos.
Atentados.
Y luego…
______ luego, nadie sabe.
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¿Entiendes ahora por qué os imitamos, madre?

Cantaremos el ‘Ojalá’ de Silvio;
Para la libertad’ de Hernández.
Quedaremos en la plaza
para leer las poesías de Ángel.
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Y así despertaremos en el mundo
igual que osos pardos después de hibernar
durante casi veinte años.
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( 8 )
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Cantadas con rabia por los que siempre callaron

sábado, 15 de mayo de 2010

No se atreve la luz si no estás tú


Semanas de más,
una semana menos.

Tengo rotos todos los pantalones
y lo demás son botones
que se me caen de la camisa.

Esto de vivir con prisa…
esto de hacerme moratones…
esto de pintar sonrisas
e intentar coser corazones…

Que si te enverso de noche
y te beso de día
y despierto del verso en el que dormía
acabarás pronominalizándote
como los sintagmas.

Date la vuelta hacia el otro lado
que estamos calentando la almohada,
que me quitas las sábanas
y yo a ti el aire.


Que le suelo dar de comer a la familia del peluquero
al menos una vez al año.
Mientras, invento un agujero
para escribir las notas de clase:

El que pestañea, pierde

Los cambios de temperatura me hacen llorar

o, mi preferido

Por si no lo habéis notado, hoy estoy enfadada.
Tengo frío


Que no quiero salir a la ciudad sin abrigo
no puedo jugar con la calle
ni dormir si no es contigo.

No puedo pagar y pedir que se callen
las sombras que me espían.
Las niñas sensatas
deben mucho más dinero.

Por eso sé que el peluquero
_______________ya no me fía.
( 8 )
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- ¿Quién sería el primero en descubrir el poder de la poesía para matar el amor?
- Yo creía que la poesía era el alimento del amor.
- De un amor sólido tal vez pero, si no es más que una ligera inclinación, un mal soneto lo mataría en el acto.
- ¿Y qué recomienda para fortalecer el afecto?
- Bailar, aunque la pareja sea apenas aceptable.

jueves, 29 de abril de 2010

Mariprosas


Sentada al lado de tu sitio libre
viajo de la mano de un bolso de Betty Boop.

No oigo nada.
La nada me oye a mí.

Mareada entre montañas que enseñan la vida
desde el punto de vista verde.

Gredos.

Antes me daba vergüenza decirlo

¿Qué haces?
Escribo

Y canto.
Y así ya no me mareo tanto.
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Que no sé lo que tengo hasta que no me enclaustro en un bus
y dejas de meterte con mi flequillo
o con mis trenzas
y con mis pantalones
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_______(a estos últimos debes odiarlos
_______porque siempre los invitas a abandonar
_______mis piernas)
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Y es ahora
cuando miro a un lado y veo cristal
__sin hielo ni firma ni nada,

y veo cuero
__ sin pinchos ni botas ni púas
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y veo bares
__sin aceitunas ni taburetes ni pelo azul
.
y leo blogs
__ sin voz ni razón, sin pena ni gloria.
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Es ahora
cuando conozco
lo que de verdad queda
siempre que salgo de casa.
( 8 )
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Que no sólo conozco su última pesadilla,
también las mil anteriores,
y yo sí que no tengo cojones a decirle que no a nada,
porque tengo más deudas con su espalda
de las que nadie tendrá jamás con la luna

(y mira que hay tontos enamorados en este mundo).

--Tayler Durden--

sábado, 24 de abril de 2010

Aprendo a tener paciencia… y escribo.



En una vida triste
la tristeza no se abriga con cuero
pero se disimula.
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La tristeza se lleva a sí misma
comiendo furgonetas llenas de turistas,
sacándose el carné de relaciones públicas.
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Se cree que ha salido del túnel
por haberse quedado mirando la luz de una farola
que devuelve las ganas
y aparta la vista
de todo aquello que ya no quiere ser.
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Desafía la grandeza de las nubes
siempre mirándolas por encima del hombro
(ahora más que nunca)
atado a pasiones y cadenas
que cuelgan de sus botas.
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El chico triste entristeció su cara.
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Primero le cortaron la libertad
con barrotes y alguna droga.
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Luego cortó sus propias cuerdas
trenzadas con enfermedades y deudas.
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y dijo adiós.
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En una vida a medias
los medios no importan más que los fines
pero sí influyen.
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( 8 )
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Te pareces a los caracoles: te sobra techo, mueres en flores tras la espesura del chaparrón.
Y esque el camino bueno se ha vuelto malo y no quieres pegar ni un palo,
que solo quieres escuchar tu voz.

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Para ya.

domingo, 11 de abril de 2010

Las mangas de mi camisa se suicidan en lejía si no te abrazan



Déjate enseñar el arte de surcar el frío,
de nadar sentados en las rodillas
y enterrar en nieve los dedos de los pies.

Navegar
sin velas ni timones
un mar blanco curtido en aludes
y domado por máquinas
que llevan tridentes;
_____aneptunadas.

Prueba
__ con la boca
la luz del viento helado,
el roce acuchillándose en madera
como un manojo de caricias.


Pero amarga el tiempo lejos
de recitales a oscuras y con suerte
merendándonos vestidos
__(amor, ya quiero volver a verte)
igual que Ángel se merendaba a las bañistas.


Déjame decirte
Que las musas son caseras
y ellas no viajan con mortales.

Se acurrucan en la cama vacía
buscando cualquier otro paisaje
que deleite,
que sacie,
que ensucie con distracciones
la tediosa sensación de no ser.
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Igual que la imagen del espejo
cuando ya nada reflejado en él queda.
( 8 )
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En el mismo folio la lista de la compra y una canción como un cupón de los ciegos. Rima la soledad con el atún en aceite vegetal y en oferta, ¡vaya precios sin competencia!
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Mais quand il me prends dans ses bras je le dis..
"Io sonno il capone della mafia."
Así que cuidadito conmigo, chaval.
(Quiero parar)

viernes, 12 de marzo de 2010

El milagro del abecedario, la tortuga que rompe a volar...



Je t’aime,
encerrados los dos en tus pensamientos
(yo, espectadora de la lucha interna
y tú… tú sabes que estás ganando)
quitándonos el aire en refunfuños,
contaminándonos.

Je t’aime, mon frère,
más que la espuma a las orillas,
más que la risa al llanto,
más que a las amapolas rojas
y al color morado.

Je t’aime, mon habib
con los ojos cerrados,
con las manos y las uñas,
con las entrañas
______--que están llenas de gatos—
con mis pestañas…
__con cada célula, con cada átomo.

Je t’aime, mon amour,
entre cojines de casualidades
que aún tengo guardados,
entre retales,
entre las costillas,
entre pámpanos mojados..
____con los bolsillos vacíos
____y los carrillos llenos.
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Parce que quand tu me prends dans
tes bras tu me parles tout bass…
__Je vois la vie en...

_______________(dímelo tú)

( 8 )
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Quiero hacer contigo
lo que la primavera hace con los cerezos.

jueves, 25 de febrero de 2010

Se ha desbocao la primavera...



La primavera adelantá con delantales lúgubres de frío. Verdean cáscaras los pícaros, dóciles al sueño del día. Escondiéndose están María y sus hábiles secuelas húmedas y frívolas en un baúl arañado de "ya no más".
Impávidos reproches aúllan dolientes sábanas, ardientes cítaras y ciegos móviles sin monodía acompañada. No hay más frío, ni más sol, ya casi no hay nada.
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( 8 )
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Y cuando vuelves hay fiesta en la cocina, y baile sin orquesta
y ramos de rosas con espinas.
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Primavera ven y cúrame el invierno

lunes, 15 de febrero de 2010

Voy a construir en el cielo un jardín sujeto con pinzas


Tú te escondes en palabras
esperando un llanto de otro país,
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encogiendo hombros y ensanchando el alma,
corazón, quédate esta noche a dormir.
Haremos fiesta en los portales
o nos arroparán los meses disfrazados
.
donde antes hubo parques y puestas de sol.
El amarillo amoratado del frío
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mirándonos ahora hacia otro lado.
Estoy aquí, ¿aún no te has cansado?
Nueva vida, no pienses lo que has vivido
o todo lo que por ti no ha pasado.
Selene nombra lo aprendido
______y se aprende rápido, en tus brazos.
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( 8 )
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Creo que soy porque te invento (...)
y tú en esa vigilia alientas
la sombra con la que alumbras
y el murmurar con que me inventas
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Y aunque a veces vuele bajo cojo altura si te veo

sábado, 13 de febrero de 2010

Siento que es un vendaval con vosotros




"Eres la Magdalena encantada con sus malas compañías,
a la que unos llaman loca, y otros poeta.
Eres la chica de una canción de Sabina.(...)
El lunar encima de unos labios que sacan de quicio."


En la escarcha del jardín crecen las flores como palabras.


Mientras tanto, desde una boca a muchos kilómetros que se deja morder como si fuera un suspiro, se oye cómo

"tú mueves tus labios de Selene
y con un hechizo de carmín veloz
vuelves universo la oquedad del llanto."

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Se me han acabado las palabras. Tengo muchos muchos hechos para vosotros.
Gracias.

sábado, 23 de enero de 2010

Y si se acaba la gasolina...



En los recuerdos, era invierno. Pero allí nunca se sabe, quizá simplemente era de noche. O una tarde de verano. De lo que está segura es que fue en casa. No en esta, sino en la común a otoños, gatos, leña, verde, bosques, zarzas y robles. En el sofá rojo con cuadraditos que mamá compró aquel año. Esperando, antes de salir a ver estrellas. Entreteniéndonos con nuestras cosas de niños (él con cuarenta años). Jugamos a los físicos, a los matemáticos, a los geólogos y a los montadores de puzzles sin pieza clave. A falta de cinco minutos, inventó historias:
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>>Te contaré algo. Un casi-secreto. Esto ocurrió hace muchos, muchos años. Con tu edad, tal vez menos, me enamoré de los relojes. De esos que hacen tic, tic, tic… con compases de agujas que te adormecen si los escuchas largo y tendido, o te avivan el cuerpo casi igual que una buena comida. .
En mi casa no éramos familia de dinero. Nada de caprichos.
Mi abuelo, un hombre observador y listo, muy listo, tenía ahorrados unos duros para los nietos. No mucho. Un mes de sueldo a repartir entre ellos. Mis hermanos y yo no lo apreciábamos. Ni pensábamos en dinero.
Al parecer yo le caía más que bien al abuelo, me enseñaba todo lo que sabía y que le había dado la experiencia de los años. Por decirlo de algún modo, era su ‘favorito’.
Conociendo mi pasión por los relojes analógicos, mi abuelo, con el dinero que tenía ahorrado, me regaló uno el día de mi primera comunión. Era elegante y humilde como él, con la correa de cuero y los números grandes, como a mí me gustaban.
Todos los días me ponía mi nuevo reloj, el reloj que me regaló el abuelo, el reloj que más tarde tendría el cuero desgastado y el cristal con roces. Y jugaba a las canicas con él en la muñeca. Y al clavo, a tirarnos por la arena… Y decía incluso que estudiaba, pero en realidad me quedaba mirándolo, sentado delante de la mesa de mi habitación.
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Unos de esos días en los que amanece gris, o no amanece, y sabes de antemano que no va a ser tu día… lloré.
Porque lo había perdido. Porque ni en los bolsillos de los pantalones, ni en la mesilla de mi cama, ni en casa de mi vecino, ni siquiera en la mente prodigiosa de mi madre, donde todo está organizado milímetro por milímetro, como un mapa a escala de la casa… ni siquiera ahí apareció el reloj del abuelo.
Estuve triste mucho tiempo. Claramente no sé decir cuánto. No aceptaba horas de ningún otro. Sentía que le había defraudado. Pero acércate, y escucha…
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Y se quedó callado.
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tic tic tic..
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No, sería el de la cocina..
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tic, tic, tic
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O que estaba lloviendo.
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tic, tic, tic…
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Comprendan, lectores, que para una niña de apenas siete años, era el mayor descubrimiento de todos los cuentos que le habían contado hasta entonces. Era imposible, era, era… como si se lo hubiera tragado. Y no cesaba nunca el tictac. No paraba, siempre que tuviera gasolina… y eso a Pedro le sobra.
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>>Nunca llegué a perderlo. Lo guardé aquí, en el corazón, que más tarde perdí de tanto echarlo de menos. Ahora él siempre va conmigo. No hay un sitio mejor para llevar lo que más te gusta, ni lo que más ha vivido todo lo que tú has vivido.
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La niña no se lo creía. Sin corazón no se puede vivir, eso lo sabía hasta un niño de parvulitos. Seguía atónita, preguntando por el truco. Rebuscó en todos los bolsillos del hombre, en los puños cerrados… y nada, no había relojes por ningún lado. A la fuerza, tenía que ser, como poco, real.

>>Y ahora venga, vamos a poner la mesa, que la cena ya está y se va a enfriar la comida –dijo.

Y no le dio importancia, como si fuera lo más normal del mundo.
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* * *
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Siete años más tarde – para algunos, muy poco tiempo; para otros, media vida – llega la niña a casa. Aunque ya no es tan niña, ni esa es “la” casa. Una sospecha previa por la mañana, viendo a sus padres juntos. Pero no pudo imaginarse nada de lo que se les venía a todos encima. Llamada en medio de la rutina y de una casa desolada.
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“Vete comiendo. No tardamos. Se ha quedado sin gasolina..”
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Luego, un mar en llanto.
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( 8 )
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Gente valiente que tiene miedo a morir y a que se mueran los demás
[Con este texto me presento al concurso literario del IES Claudio Moyano]

miércoles, 20 de enero de 2010

Pudo ser un amor del montón, pero todo el montón era mío...




Ahora salto
y me pongo a hablar de mí.
Pero tropiezo y caigo.
La soga se enreda en los tobillos.
Ya no quiero jugar.
O quizá sí.

Ya no quiero escuchar
ni escribir,
ni pararme en los semáforos
si caminas en la otra acera.
Ni salir al tejado de la azotea
a secar la lluvia con los labios
mientras te veo venir
agachando cabeza y orgullo.



Creo que hablan de unas llaves..
que encierran ajedrez y tiza
en medio de unos números alfabéticos.

Me había perdido.

Vuelvo de incógnita. A sub n
O quizá no.
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(8)
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Y en nada se queda el montón.

miércoles, 6 de enero de 2010

Una es darse la vuelta... la otra, darle la vuelta al mundo


Ella, pálida,
agita azules montes en la noche
y se repliega en blancas alfombras
cuando duerme.
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Ella, lejos,
se ríe con dos caras de todos nosotros
y se besa a sí misma,
consumiéndose.
Creyendo que no puede sufrir de envidia.
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Ella, triste,
se columpia en retales húmedos
y fríos como esta cama,
que llora demasiado pronto
___—no nos queda casi nada—
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Ella, sola,
alza el cuello majestuosa
y le sopla la luz a las farolas
cegando insomnios semanales,
robando alientos.
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Ella, humilde,
se desenreda las espinas
y las siembra en los molinos
enharinando arenas de nieve,
fruto de la corteza inerte
en cuyos surcos te has perdido.
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Y reposa, divertida
observándote aún con vida,
con un brillo demente en los actos.
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Como un niño con una lupa
que juega a matar hormigas.
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( 8 )
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“Nunca sabes distinguir si es invierno o verano,
si yo me hago daño, cariño, tu no sales ileso”